Eficacia empresarial
Se entiende por eficacia empresarial la capacidad que tiene la empresa para alcanzar las metas y objetivos propuestos. Si la empresa desea ser eficaz, deberá ser capaz de lograr el objetivo fijado en el plazo marcado, sin tener en cuenta los recursos que ha necesitado para realizarlo.
El término eficacia se confunde en muchas ocasiones con el de eficiencia. Efectivamente, ambos conceptos persiguen lo mismo, que no es más que lograr el éxito en los objetivos de la empresa, pero la eficiencia pretende hacerlo optimizando los recursos disponibles. La eficiencia busca incrementar los beneficios, pues pretende conseguir las metas de la empresa reduciendo al máximo los Costes.
La eficacia se puede entender como la simple consecución de metas u objetivos propuestos, mientras que la eficiencia supone la consecución óptima de dichos objetivos, ahorrando recursos, hacerlo en menos tiempo, o cualquier otra forma que le suponga a la empresa un ahorro de recursos.
- Como ejemplo de eficacia puede ser que la empresa ha sido capaz de realizar este mes 450 unidades de un determinado producto frente a las 400 del mes pasado.
- Como ejemplo de eficiencia está el hecho de que una empresa ha sido capaz de realizar 450 unidades este mes frente a las 400 del mes pasado utilizando menos materias primas y menos personal.
La cuestión está, por tanto, determinar si el objetivo a lograr por la empresa es la eficiencia, la eficacia o si ambas en realidad dan el mismo resultado. Las empresas deberán conseguir en primer lugar ser eficaces y, una vez logrado este objetivo, se exigirá que sean eficientes.
Ambos conceptos, eficacia y eficiencia, son importantes en todos los sectores de la empresa, incluyendo también el que se refiere a la administración y dirección empresarial. De hecho, a la suma de los dos se le conoce como efectividad. Estos tres conceptos se conocen como las tres E. Se utilizan para estudiar la producción, la rentabilidad y la función de una compañía.
- Eficacia: significa conseguir los objetivos propuestos. Se refiere a “lo que se hace”
- Eficiencia: es la capacidad de conseguir dichos objetivos de la manera mejor posible. Se refiere a “cómo se hace”.
- Efectividad: es la mezcla perfecta de las dos anteriores, es decir, conseguir las metas con los recursos mínimos.
Para conseguir la efectividad se exige la optimización de recursos como:
- Optimización del tiempo de trabajo. Se pretende alcanzar las metas previstas en el menor tiempo posible sin que esto suponga una pérdida en la calidad del resultado. Puede ser útil saber medir la productividad del trabajo dividiéndolo en áreas y puestos. Se persigue evitar la pérdida de tiempo.
- Optimización de la organización del trabajo. Será preciso tener protocolos de trabajo y procesos bien establecidos que eviten pérdida de tiempo. Saber priorizar las tareas es sinónimo de eficiencia. Esto se puede conseguir utilizando una agenda, una lista de tareas, etc.
- Optimización de la formación y preparación de trabajadores. Cuanto mayor sea la especialización de los trabajadores y sus técnicas de trabajo en grupo más acertadas, más fácil será optimizar su trabajo y sacarle partido.
- Optimización de los recursos tecnológicos. Es un sector primordial hoy en día para poder desmarcarse de los competidores.
- Optimización del clima laboral. Entendido este como la relación con los trabajadores, pero también sus condiciones de luminosidad, temperatura, ruido y buen ambiente. El espacio de trabajo puede motivar al trabajador.