Amortización
El concepto de amortización puede definirse como la pérdida de valor que sufre un activo durante su vida útil. Este proceso consiste en el desgaste, también conocido como deterioro, que afecta a los diferentes recursos o materiales, que pueden ser tanto tangibles, como intangibles de cualquier empresa. Como activos intangibles podemos encontrar por ejemplo las construcciones, la maquinaria o los vehículos.
Como bienes intangibles, podemos encontrar las marcas, las patentes, los derechos de autor con los que trabajan las organizaciones.
A modo de ejemplo, si se adquiere un vehículo para una empresa, con el transcurso de los años, este bien irá perdiendo su valor, como consecuencia de su uso o del propio tiempo. Además, esta pérdida de valor también puede venir, por las variaciones del precio de mercado o el contexto en el que se sitúe.
Además, es importante destacar, que no debe de mezclarse la “amortización contable”, con la “, amortización financiera”, donde, esta última consiste en la devolución de la deuda, a través de diferentes pagos de un préstamo bancario.
En este caso, con la amortización contable, cabe la posibilidad de tener conocimiento del valor actual de los activos de nuestra empresa y de esa forma lograr una gestión más eficaz de nuestros recursos.
Respecto a su uso, se pueden observar diferentes fórmulas de amortización, donde a través de ellas se puede conseguir la información sobre este valor. Utilizaremos estas fórmulas cuando por ejemplo deseemos vender un activo. De esta forma, tendremos información sobre el valor actual y sobre el precio que podríamos plantear en su venta.
O por ejemplo, al adquirir crédito. Donde poseyendo información sobre el valor del bien a adquirir, podemos reflexionar si invertir en él o no.
Con carácter general, podemos encontrar en la actualidad diferentes métodos para obtener la amortización de un activo:
Amortización lineal
Con carácter general, este sería el método más utilizado, puesto que facilita el cálculo de forma sencilla del valor del bien y de su amortización. A través de su aplicación, se puede saber cuanto sería la amortización anual del bien. Para ello seguiríamos la siguiente fórmula:
Amortización lineal= Valor inicial ÷ Vida útil estimada
Supongamos que se adquiere un vehículo que posee un valor de 3.000 euros., cuya vida estimada es de 10 años. Su amortización anual, siguiente este método sería:
Amortización lineal= 3.000 ÷ 10=300 €
Eso significa que anualmente el vehículo perderá un valor de 300 cada año.
Amortización decreciente
Este procedimiento de obtención de la amortización consistiría en desarrollar su cálculo atendiendo a la vida útil en años del activo y donde cada cuota es diferente decreciendo de forma continuada. La fórmula para su obtención sería la siguiente:
Amortización decreciente= (Valor inicial ÷ Suma dígitos) x dígito
Si continuamos con el ejemplo anterior, a través de esté método el cálculo de la primera cuota sería
Amortización decreciente= [3.000 ÷ (1+2+3+4+5+6+7+8+9+10)] x 10= 545,45€
De la segunda:
Amortización decreciente= [3.000 ÷ (1+2+3+4+5+6+7+8+9+10)] x 490,90 €
Y así sucesivamente hasta completar los 10 años de vida útil.
Amortización creciente
Este proceso sería similar al anterior, pero siguiendo un procedimiento inverso. Las cuotas irán creciendo en el transcurso de los años. La fórmula para aplicar sería la siguiente:
Amortización creciente= (Valor inicial ÷ Suma dígitos) x dígito
Si lo aplicamos al ejemplo, la primera cuota sería:
Amortización decreciente= [3.000 ÷ (1+2+3+4+5+6+7+8+9+10)] x 1 = 54,54€
La segunda cuota:
Amortización decreciente= [3.000 ÷ (1+2+3+4+5+6+7+8+9+10)] x 2= 109,09€
Y así sucesivamente.